Bloggers, bloggers, Bloggers….Lun (Sexblogs), Asado y Red Fantasmal

Buena mezcla!!

Hoy volvimos a salir en LUN en una entrevista que le hicieron a Cristián Núñez acerca de sus 2 sexblogs: "Templo del Placer" y “Anlysex”. Bien ah, este chico se las trae!! (son bien XXX)


Asado Blogger en el Parque Intercomunal

Tuvimos un asado el Sabado en el Intercomunal de la Reina y lo pasamos GENIAL.
Estuvieron: Srta Lee, Pato, Monin, Fernando Meza, Pame, Cecica, Carly, Katinita y Julio


Espero que para la próxima se sumen más y más...


Y por último les dejo un cuento de la Red Fantasmal
Es de un amigo que no tiene blog pero que quiso formar parte de esta Red. Espero les guste!




Cuerpo para un fantasma



Los cuentos de fantasmas, como el que sigue, sin duda constituyen el origen de todos los mitos y leyendas. Por medio de ellos el terror adquiere una dimensión casi infinita, sobre todo cuando se fija en los fantasmas o los espíritus de determinados escenarios. Esta historia trata de eso.

En el mismo lugar donde existió en una época el edificio de la intendencia había ahora un museo histórico, “museo de historia regional” ese era su nombre exacto. Junto a este, a su derecha, estaba la construcción más antigua de la ciudad, que había sido, en la época colonial, el depósito central. Todo lo del puerto iba a ese lugar y era controlado por una sección de la intendencia. Lo cierto, para algunos, es que un fantasma surgía de forma intermitente y en períodos bastante distanciados en ambos edificios. De ellos solo se ocupaba la planta inferior de la intendencia, que era de tres plantas y el depósito, lógicamente, estaba abandonado. Todo el personal del museo se marchaba a las siete de la tarde. Un día, una muchacha que se decía aprendiz de lo fantástico, decidió desafiar al fantasma de ese lugar con un libro muy antiguo que había encontrado en la biblioteca de la ciudad. Según ella, era un libro de conjuros. Se dirigió una noche de luna llena a la intendencia con el libro y un grabador, decía que iba a encontrar al fantasma y preguntarle por qué motivo estaba ahí, ya que las causas de sus apariciones eran desconocidas por los habitantes del lugar. Entró al museo por la parte posterior muy fácilmente y dejó una ventana y una puerta abierta para que entrara un poco de luz, abrió el libro y comenzó a grabar lo que sigue:

“ Ante tu presencia, espíritu inquieto, vuelco algunos sentidos. Ojos, que te contemplarán cuando tu decidas hacerte presente. Olfato, que percibe todos los aromas para saber de donde vienes. Oídos , que oyen más tus silencios que tus ruidos en las tinieblas. Los seres invisibles vuelan cuando llega la noche, para convertirse en sombras que atraviesan el espacio oscuro, satisfechos, borrachos de negras amplitudes, no dudan en liberarse del encierro. Sus gritos son vibrantes y fuertes...apareced que la noche se agota....”

En la grabación se escuchó un golpe y la voz de la muchacha que decía susurrando “ es la puerta de la intendencia”. Pasados unos minutos se repitieron los golpes, sin embargo, en este caso aclaró que era una de las ventanas y agregó “ voy a comprobar lo que está sucediendo”.

Solo esto fue lo que se escuchó en la grabación, el aparato siguió funcionando pero no grabó nada, el resto de los hechos fueron completados al mes en el diario local, en la sección policiales, la cual había seguido el caso de la muchacha desaparecida en la intendencia, porque después de ese día no se supo más nada de ella y solo quedó el fragmento de cinta que se menciona arriba. El resto lo contó una señora vecina que al escuchar ruidos se acercó al lugar y pudo ver desde la calle, por una ventana semiabierta, lo que describe así.

“Aquel engendro no debía medir más que un metro de alto y resultaba esquelético, sus manos y pies eran enormes y se movía muy rápido. El monstruo era de color blanco y dio varias vueltas por el despacho de la intendencia con una rapidez inusitada, sin chocar ningún mueble. Se arrojó sobre la muchacha que estaba en la habitación y al golpearla desapareció mientras que ella retrocedía hasta dar con la pared . Le grité a la muchacha y llamé a los vecinos, pero una luz en el interior hizo que mirara nuevamente. El engendro se deslizó desde la parte superior de la pared hacia la chica aterrorizada y se abalanzó sobre ella. Creo que hundió las manos en su pecho y se quedaron así, inmóviles, hasta que el espectro desapareció dentro de la mujer. De pronto, se escuchó un alarido escalofriante y todas la puerta y ventanas se cerraron “
Cabe añadir, que a este último suceso lo vieron más vecinos, pero ninguno de ellos quiso declarar. El museo fue cerrado por ser la escena de un supuesto crimen y luego porque la gente dejó de concurrir. De esto pasó mucho tiempo y solo quedan las historias que se cuentan de una generación a otra. Pero este relato adquiere importancia por otro motivo. Si la policía indagara en el archivo médico desde la época en que sucedió el hecho de la intendencia hasta la actualidad, podría ver que cada noche de luna llena hubo un asesinato violento y las víctimas fueron encontradas en el antigua depósito que está junto a la intendencia. Los peritos médicos dicen que nunca se usó un arma, las víctimas tenían el torso destrozado y algunas unos símbolos y hasta algunas palabras que decían “sáquenlo” “libre” “ posesión” “asesino”. Hasta el momento nunca se pudo descifrar el misterio ni encontrar al criminal, pero lo cierto es que en la intendencia nunca más se escucharon ruidos y está por abrirse nuevamente el “museo de historia regional”.